martes, 4 de octubre de 2011

La política social construye, no destruye ni olvida a sus concuidadanos


Una manera diáfana de entender la problemática social que vive Turbana podemos observarla en esta leyenda fílmica que ha quedado en la retina de muchos. No es necesario ir a  África, ni examinar evidencias en hechos destructivos de la post guerra; no hay nada más destructivo en el ser humano  que sentirse excluido de la sociedad por el estigma de ser pobres. Ser pobres en la sociedad capitalista actual en que vivimos es un hecho parecido como no tener vida, no poseer libertad y tratar de ser manipulado por las carencias que poseen estas familias estampando un sello monetario a cada una de sus necesidades con dádivas de los que hoy poseen mejor suerte, ya no importa lo humano del Otro, no hay respeto, no hay fraternidad, hace presencia la falta de pundonor y lo peor aun no hay  Amor en los actos para con el Otro (Sálvese quien pueda).

Muchos a veces se preguntarán: ¿Dios si existes porque no te manifiestas entre tanta desigualdad?, ¿Porque permites que este sufrimiento sea perpetuo para muchos?, ¿Porque permites que nuestros hermanos se sientan viudos de tu Amor misericordioso?

Los seres humanos que argumentamos nuestra racionalidad y que nos manejamos bajo la trípode de pensar, actuar y reflexionar, no podemos permitir que muchos de nuestros coterráneos vivan de esta forma y que sus sueños se trunquen por el único hecho de nacer en una cuna humilde, todos tenemos derecho a soñar y a luchar porque estos sueños sean una realidad, para ello brindarle herramientas es lo más loable que puede hacer un ser humano por el Otro.

Para ello analizaremos cada uno de los factores que hoy son dardos que menguan la fe, dardos que permiten que la esperanza se difumine y que transite en cada una de sus mentes la soledad y la falta de fuerzas por luchar en esta vida cada día a día.


Adentrémonos en la realidad de sectores poblaciones que existen pero que no poseen una calidad de vida digna de un ser humano. Nos enfocaremos en dos sectores altamente vulnerados en los sectores: El Oasis y Los Olivos. 

Para ello tendremos como punta de lanza, uno de los más célebres proverbios orientales:

("Regala un pescado a un hombre y le darás alimento para un día, enséñale a pescar y lo alimentarás para el resto de su vida.”)
A  partir de este momento reconoceremos un mundo llamado El Oasis y Los Olivos que en contraste con sus nombres su realidad enmarcan otros significados. 

Primero identifiquemos estos, El Oasis sector aislado de la estructura municipal localizado después del  cauce del Arroyo del Polón vecinos del Sector Alto Bosque, Flor del Capacho y Nuevo Bosque. 

Sus pobladores en la mayoría agricultores, mototaxistas, vendedores ambulantes, vendedores informales, asalariados, amas de casa, desplazados, estudiantes, entre otros, gente que se esfuerza por superarse, obtienen sus ingreso a través de lo que permite la madre naturaleza obtener, mediante los pasajeros que puedan alcanzar (si no llueve), mediante la venta que puedan lograr (si el día le hace un gesto agradable bajo un sol impetuoso), y estos últimos con la venta de las ganancias de todos estos como ven aquí no hay industria ni sectores productivos que fabriquen empleos que lleguen a cobijar lo estipulado legalmente; pero entre todo este conglomerado de personas se encuentra un gran número de desempleados que no se han tenido en cuenta y que a cada minuto que pasa generan una sociedad más vulnerable y por ende más pobre.

La educación de estos estadísticamente no supera el bachillerato, y he aquí donde comienza el gran reto de muchos y este comienza con resolver grandes incógnitas entre las cuales deseamos explicitar dos:
¿Qué puedo hacer para salir de esta realidad? ó  ¿Como puedo salir de estas trampas de la pobreza? sin lugar a dudas piezas claves de un rompecabezas en donde todos tenemos injerencias. 

Otra trampa mortal es la que genera el acceso a la Salud como derecho fundamental  para estos usuarios y que brinda el establecimiento Hospital Turbana E.S.E. que en forma lamentable ha sufrido un colapso económico  donde la calidad de sus servicios ha quedado mal parada, así lo pueden argumentar los ceses de actividades o los denominados  Paros Hospitalarios que han desarrollados sus mismo funcionarios y que NO se pueden excluir de esta realidad por ser un efecto domino en esta problemática; nadie no da lo que no posee la E.S.E. merece revivir  para cobijar en forma vital la salud, no sólo de estos sino no todos sus usuarios.

Sin  ningún tipo de carnet que blinde el acceso al servicio y sin ninguna contraprestación en el nivel de urgencias cuando urge la necesidad de abordar un vehículo con escazas características de lo que se conoce como una ambulancia. Es necesario pedir la verificación de los  últimos Sisbenes expedidos porque nadie comprende cómo se aumentan de porcentaje cuando la carencias aumentan en forma notable y donde este incremento del porcentaje de estos da como resultado una menor inversión en el área de salud como la de cobertura notablemente. La salud es fundamental como también lo es acceso a ella.

En el área de nutrición se agudiza más todo este andamiaje, hay muchos de nuestros hermanos Turbaneros en estos lares que no tienen resueltos el problema de alimentación y penosamente hay que demarcar esta realidad con esta frase: "A veces no tienen con que alimentarse", aspecto que genera un caos tremendo dentro de todas estas facetas pero allí no termina todo.

También subyace un problema de habitabilidad debido a que las viviendas que poseen algunos (no todos aclaro) no poseen los servicios públicos básicos, es más los únicos servicios que poseen son el Servicio de Energía Eléctrica y en escaso nivel el Gas Natural. Pero el resto de los servicios donde queda y que se hace con la población restante sin domicilio propio.

Y tras de todo aparece un factor que termina de desfigurar los sueños de cualquier ciudadano colombiano en nuestro caso como turbaneros, no hay acceso a la justicia para estas personas que pareciera ser parte de una Turbana olvidada y sin protección, muchos ni siquiera los conocemos..., sujetos a esta realidad  no podemos concebir que se sigan vulnerando sus derechos con nuestras omisiones.

Se habrán preguntado por qué no describimos al sector Los Olivos a estas alturas de este texto, y esto es debido a que este sector esta aun en peores condiciones por eso te invito a que lo visites y saques  de el tus propias conclusiones, estas líneas concluyentes no han sido inferidas ni manipuladas, son nuestra realidad nuestra Turbana olvidada llena de tristeza y de soledad. Donde también existe un Dios que desea tocarnos al leer este documento y sensibilizarte, todos podemos poner nuestro grano de arena para que donde no ha llegado la presencia estatal municipal lleguen nuestras acciones voluntarias de humanismo y filantropía, trabajar es el verbo que utilizamos como constante todos los distintos comites de la campaña Senen Cantillo a la Alcaldia por consolidar una mejor Turbana en donde el decoro, el respeto, la tolerancia brille; donde la pobreza no sea excluyente sino incluyente por el único valor inconmensurable que tenemos por el hecho de ser personas.


Los Olivos un sector olvidado de Turbana, localizado detrás del antiguo matadero hoy la Umata detrás del sector Aires Libres (Al lado del Campo municipal), ves y visítalo y analizaras a donde conducen las acciones del hombre cuando no la ejecutamos con Amor.

Senén Cantillo Paternina, tu reto no es llegar a la Alcaldía el 30 de octubre, tu verdadero reto es transformar con la voluntad de Dios la soledad en esperanza y que esta esperanza sea gozo de un pueblo que muy bien lo tienes merecido a través de tu arduo esfuerzo Amigo.

Por eso nada ni nadie nos podrá separar del Amor de Dios, que se manifiesta en los limites insondables de la humanidad a través de su misericordia infinita y su protección de lo alto,...y el cual da recojer sus frutos a su debido momento con respuesta a la gratitud de propender el beneficio general de los más pobres.


!Dios nos bendiga  a todos¡

Editado por Alexander Gómez Flórez

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